miércoles, 30 de diciembre de 2015

Teresa de Calcuta: el mito continúa. Parte II

Teresa de Calcuta con Ronald Reagan y su esposa Nancy

Cuando Teresa de Calcuta visitó el barrio de Anacostia en Washington en 1981, no fue precisamente bien recibida. Allí la gente, la mayor parte olvidada por los dirigentes de Estados Unidos y apartada del derecho a tener recursos para llevar una vida digna, no estaba dispuesta a que alguien viniese a su barrio a no aportar alguna solución, sino a ganar fama a su costa perpetuando el mal estado de las cosas presente. Por ese motivo un grupo de vecinos protestó ante la conferencia de prensa que iba a dar esta afamada mujer; y fueron muy claros en su denuncia delante de ella, indicando que estaban molestos, diciéndole que lo que realmente necesitaba Anacostia eran trabajos decentes, viviendas y servicios, no caridad. La respuesta de Teresa fue tan pobre como su argumento moral: "Primero debemos aprender a querernos unos a otros". 1 Cómo el que no tiene lo más elemental para vivir va a poder amar a quien vive en el dispendio y la riqueza desmedida. No es una cuestión de envidia, sino de dignidad humana, dignidad que parecía valorar poco esta religiosa beatificada. Primero será el respeto y el atender a las necesidades más elementales de las personas, lo demás podrá venir después. Defender la visión de esta mujer sobre la pobreza y el sufrimiento, innecesario, que conlleva, apostando por la resignación ante este estado calamitoso de las cosas no es apostar por la paz y la convivencia armoniosa entre los seres humanos, es una apuesta ya muy antigua en su Iglesia, como la que nos ofrece San Pablo, y que lleva finalmente al rencor y al enfrentamiento.
Pienso que es muy hermoso que los pobres acepten su destino, que lo compartan con la pasión de Cristo. Pienso que el sufrimiento de los pobres es de gran ayuda para el mundo. 2
Sin embargo, aquí yo no voy a acusar a la religión de la causa de este mal, aunque la religión haya sido utilizada una y otra vez en este sentido; porque dentro de la religión y de la misma Iglesia Católica hay visiones muy diferentes de la pobreza y del mundo. Podemos recordar a personas como el Arzobispo Oscar Romero, que fue precisamente asesinado por defender la justicia y la paz entre los hombres y mujeres, abogando por acabar con la represión y la explotación 
Yo quisiera hacer un llamamiento, de manera especial a los hombres del ejército. Y en concreto a las bases de la Guardia Nacional, de la policía, de los cuarteles... Hermanos son de nuestro mismo pueblo. Matan a sus mismos hermanos campesinos. Y ante una orden de matar que dé un hombre, debe prevalecer la ley de Dios que dice: "No matar". Ningún soldado está obligado a obedecer una orden contra la Ley de Dios. Una ley inmoral, nadie tiene que cumplirla. 
En nombre de Dios y en nombre de este sufrido pueblo, cuyos lamentos suben hasta el cielo cada día más tumultuosos, les suplico, les ruego, les ordeno en nombre de Dios: Cese la represión. 3
La religión no es la causa de fondo de estos males, lo es la naturaleza humana, que utilizará a la religión y a las instituciones religiosas con este fin, del mismo modo que utilizará a organizaciones seculares, como las organizaciones humanitarias, con fines similares.
Amnistía Internacional es una organización de propaganda de guerra para el imperialismo. De hecho, la mayoría de las organizaciones de derechos humanos más publicitadas en occidente funcionan como agencias de adoctrinamiento ideológico para el neocolonialismo y el imperialismo. A este respecto, han reemplazado a los misioneros cristianos del siglo XIX, que proveían la justificación para el sometimiento colonial bajo el pretexto de extender la "Civilización cristiana". 4
El mundo del ser humano está basado en gran medida en el engaño y en cierta forma las propias personas: embaucadores y engañados, explotadores y explotados, contribuyen a ello. El caso de la Madre Teresa es así, llevada al estrellato por los medios de comunicación en el documental divulgado por la BBC ya en 1969, Something beautiful for God (Algo bello para Dios) de Malcom Muggeridge, del que luego se editó un libro, es un caso de propaganda donde importan, como tantas veces, poco los hechos y más la necesidad de creer en algo. Aunque Teresa de Calcuta fuese realmente una fundamentalista religiosa y sobre todo una maniobrera política cargada de astucia, amiga de rodearse y de servir a los poderes seculares, políticos y económicos, sin importar mucho su catadura moral (desde el dictador haitiano Duvalier a Franco, Margaret Thatcher, Ronald Reagan o el estafador Charles Keating, o intentando disculpar a Union Carbide por la matanza que provocó en Bophal en la India en 1984).  Cumpliéndose el viejo proverbio: Populus vult decipi - ergo decipiatur (Si el pueblo quiere ser engañado, pues que lo sea-será engañado).

PS:
Ve la Primera Parte: Teresa de Calcuta: el mito continúa. Parte I.

Notas:
1. Phyllis Theroux. Amazing grace. Washington Post. 18.10.1981.
2. Christopher Hitchens. The Missionary Position. Mother Teresa in Theory and Practice. Verso. 1995.
3. Monseñor Romero. Madrid: IEPAL Editorial. 1989
4. Geraóid Ó Cólmain. Amnesty Internatinal, War Propaganda, and Human Rights Terrorism. Wrong Kind of Green. 9.8.2013.

domingo, 27 de diciembre de 2015

La propaganda de Amnistía Internacional contra quienes combaten el terrorismo en Siria


El analista Tony Cartalucci explicaba de forma clara la preocupación que tenía y tiene el poder económico estadounidense sobre la intervención rusa en Siria, con la aprobación del Gobierno  legítimo de Siria. Tal preocupación viene dada porque el Ejército ruso, junto al sirio, iba a combatir de forma decidida y definitiva a los terroristas que han estado asolando y asolan Siria: Al Nusra (Al Qaeda en Siria), el Estado Islámico (derivado de Al Qaeda) o remanentes de otras organizaciones terroristas, que comparten dirigentes, militantes, objetivos y métodos con las anteriores, como el eufemísticamente apodado Ejército Sirio Libre, ni sirio ni libre. Estos terroristas son los mercenarios con los que los magnates anglosajones pretendían desestabilizar Oriente Medio, destruyendo el Estado de Siria y también el de Egipto, Líbano e Irán; de similar manera se evitaría la reconstrucción de Irak. Con el propósito final del control de Oriente Medio y de establecer aquí las bases terroristas de donde lanzar una guerra de desgaste mercenaria contra los grandes rivales del poder occidental anglosajón, Rusia y China. Rusia rompía por este motivo estos planes, para evitar un mal mucho mayor en el futuro, de ahí que este país haya sido el centro de un ataque multifrontal: ataque militar contra sus aviones y soldados, como el derribo del caza ruso por el lacayo local Turquía (de la OTAN) y el asesinato de su piloto y de un marín también ruso; ataque terrorista contra el avión de pasajeros, de nacionalidad rusa, en Egipto; y ataque económico, político y mediático. En este último papel tenemos a los medios de comunicación y junto a ellos esas organizaciones que utilizan los derechos humanos con fines políticos y económicos, que con los primeros forman un dúo tan fraudulento como peligroso. Ya advertía yo en este artículo:  Aviones rusos atacan en Siria y EE.UU. actúa en Afganistán, que los medios de comunicación trataban de acusar a Rusia de atacar objetivos civiles con el fin de desprestigiar su intervención y poner a la opinión pública occidental en contra, para precisamente parar la derrota de los mercenarios al servicio del poder económico de occidente. Y que las organizaciones "humanitarias" vendrían también en este socorro propagandístico.
Por cierto, ya pueden ver las acusaciones de los medios corporativos occidentales de supuestas víctimas civiles o los ficticios opositores moderados en el ataque contra los mercenarios islamistas por parte del Ejército sirio con la ayuda rusa. También verán a las organizaciones "humanitarias" haciendo este papel. Todos tratando de parar la destrucción de los batallones de mercenarios que actúan al servicio del poder económico occidental.
Y así ha sido, en una masiva campaña de propaganda Amnistía Internacional emite uno de sus típicos informes: carente de todo rigor y evidencia, muy virulento y acusatorio hacia los rivales económicos y políticos de quienes promocionan a la organización "humanitaria" y en el momento oportuno ante el intento desesperado de frenar los éxitos militares contra Al Qaeda y derivados en Siria; es desesperado porque si se corta el flujo logístico desde Turquía, la derrota de los mercenarios es inminente y por tanto Siria no podrá ser destruida y dividida. Por supuesto, esta campaña masiva de propaganda ha contado con el papel de los medios de comunicación. Ambos al servicio de sus poderosos patronos, no del periodismo y, claro, tampoco de los derechos humanos; y menos de la paz y respeto hacia las personas y entre las personas.
En el informe de Amnistía Internacional titulado 'Civilian objects were not damaged' : Russia's statements on its attacks in Syria unmasked, se habla de que lo han investigado de forma indirecta, con información aportada por "activistas" (¿personas a sueldo para difundir propaganda? ), de indicios de presuntos ataques, con cifras de presuntos muertos civiles (200) no basadas, como todo lo demás, en ninguna evidencia, en ninguna prueba. 2, 3
De este modo y con semejante nivel de "información" se lo han dejado fácil a la Administración rusa para desmontar tal cúmulo de difamaciones basadas en nada factual.
 Hemos conocido el informe: no se ha publicado nada en concreto ni nada nuevo. Son los mismos lugares comunes e información falsa que en varias ocasiones hemos desenmascarado. 4
Indicaba el portavoz del Ministerio de Defensa ruso Ígor Konashénkov. Suposiciones sin ninguna prueba; afirmaciones de algo que no pueden conocer, la presencia o no de mercenarios islamistas ("rebeldes", "grupos opositores"); el socorrido uso de que se han utilizado bombas de racimo, cuando Rusia desmiente que las utilice, además de que esto se podría demostrar si fuese cierto y no se hace. Podemos recordar aquí las mentiras de las armas químicas y de las bombas de barril en Siria. Cómo no, tampoco falta el archiusado recurso de la propaganda de guerra utilizando el ataque, real o inventado, a civiles en el mercado o la panadería. ¿Se acuerdan de las masacres del mercado y de la panadería en Sarajevo? Y en Siria también. Aquí lo tienen:



Además, Rusia puso el dedo en la llaga, mostrando la hipocresía y deshonestidad de Amnistía Internacional. No solo falsifican, con consecuencias nada buenas para los propios sirios, porque esta falsificación podía haber supuesto el no continuar luchando contra esos desalmados que tanto daño han hecho y hacen a la gente de Siria, sino que sale a la luz su comportamiento opuesto cuando se trata de aliados o amigos del poder anglosajón, aunque estos sí sean tantas veces realmente criminales que se deberían condenar y perseguir.
Tenemos preguntas para Amnistía Internacional: ¿por qué esta organización guardó silencio y no quiso ver las pruebas materiales, irrebatibles y reales del uso de bombas de racimo por las Fuerzas Armadas de Ucrania contra las ciudades en el este de ese país?
"Es extraño que Amnistía Internacional no haya prestado atención a los crímenes de guerra perpetrados en Siria ni a sus autores antes de que la división aérea rusa llegara al país. El contenido selectivo de los informes de la organización Amnistía Internacional es notorio. No hemos visto hasta el momento informes detallados sobre las actividades de la coalición liderada por los saudíes en Yemen ni sobre los grupos terroristas que operan en Siria e Irak". 4
Como dice un conocido dicho: Quien tenga ojos para ver y oídos para oír, que oiga y vea.
Junto a todo esto que hemos comentado, tenemos que esta organización acusa de crímenes de guerra a Rusia. Y esta es otra de las artimañas y falsificaciones que utiliza Amnistía contra aquellos países u organizaciones no amigas de los dirigentes de Estados Unidos  (o Gran Bretaña). La vemos también, de forma más escandalosa si cabe, en el caso de Palestina  (acusada) e Israel (víctima): La falta de honestidad de Amnistía Internacional ante el conflicto en Palestina. En cambio, no acusará de tal delito a los amigos, como Israel, o al poder militar occidental, como la OTAN o el Ejército de los Estados Unidos. Para estos tiene un trato bien pero que bien distinto. Llama a la intervención militar de estos y cuando están cometiendo todo tipo de tropelías y barbaridades, como han hecho una y otra vez: Libia, Irak, Yugoslavia..., no hay una clara condena, por supuesto no una acusación de crímenes de guerra, a lo más una recomendación. Cuando la OTAN bombardeaba de forma inmisericorde y sin tener ningún escrúpulo lo que quedaba de Yugoslavia, destruyendo sus fábricas, granjas, hospitales, hoteles, medios de comunicación, puentes, aeropuertos, etc; que era denunciado por los propios militares de la OTAN, por ejemplo el capitán Martín de la Hoz:
Están destruyendo el país, bombardeándolo con nuevas armas, gases nerviosos tóxicos, minas de superficie lanzadas con paracaídas, bombas con uranio, napalm negro, productos químicos para esterilizar, productos para envenenar los cultivos y armas de las cuales incluso nosotros todavía no sabemos nada. Los norteamericanos están cometiendo allí una de las mayores barbaridades que pueden ser cometidas contra la humanidad. 5
Entonces no hubo las justificadas denuncias por parte de Amnistía Internacional, bien al contrario 
En relación con el ataque del 7 de mayo —que aparentemente estaba dirigido al aeropuerto de Niš, pero que alcanzó el mercado del centro de la ciudad y un hospital civil cercano y, según informes, causó la muerte de 15 personas—, amnistía internacional siente preocupación ante la posibilidad de que la planificación del ataque por la Otan no haya tenido lo suficientemente en cuenta la proximidad de civiles.
...el número de bajas mortales civiles se podría haber reducido significativamente si las fuerzas de la Otan hubieran cumplido estrictamente las normas del derecho de los conflictos armados durante la operación fuerza aliada. 6
George Kenney, un antiguo oficial del Departamento de Estado de EE.UU., decía lo siguiente de forma clara, poniendo en evidencia el modo de actuar de Amnistía:
Dejando caer bombas de racimo en áreas urbanas muy pobladas no causa bajas accidentales, es un bombardeo de terror a propósito. 5
La siguiente afirmación sobre Amnistía Internacional u otras organizaciones similares, por ejemplo Human Rights Watch, puede parecer excesiva al profano en estos temas, sin embargo es certera. Es más, el daño que están haciendo no solo a los derechos humanos, sino a lo que realmente en el fondo importa: a la convivencia en paz y armonía,  y el respeto a las personas es enorme.
Amnistía Internacional es una organización de propaganda de guerra para el imperialismo. De hecho, la mayoría de las organizaciones de derechos humanos más publicitadas en occidente funcionan como agencias de adoctrinamiento ideológico para el neocolonialismo y el imperialismo. A este respecto, han reemplazado a los misioneros cristianos del siglo XIX, que proveían la justificación para el sometimiento colonial bajo el pretexto de extender la "Civilización cristiana". 7
Notas:
1. Tony Cartalucci. US Complains as Russia Bombs its Terrorists.  Land Destroyer. Land Destroyer. 1.10.2015.
2. Siria: La vergonzosa actitud de Rusia al no reconocer los homicidios civiles. Amnistía Internacional. 23.12.2015.
3. Syria conflict: Russian air  strikes 'killed 200 civilians'. BBC. 23.12.2015.
4. Rusia responde a las acusaciones de Amnistía Internacional: 10 declaraciones que lo explican todo. RT. 23.12.2015.
5. Michael ParentiTo Kill a Nation. The attack on Yugoslavia. Verso. 2002. 
6. Jesús Legasa. Amnistía Internacional: la jauría humanitaria de occidente. Parte II.Kaos en la red. 20.4.2011. 
7. Geraóid Ó Cólmain. Amnesty Internatinal, War Propaganda, and Human Rights Terrorism. Wrong Kind of Green. 9.8.2013.

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Teresa de Calcuta: el mito continúa. Parte I.

La Madre Teresa de Calcuta, otro producto mediático que ha engañado tanto a creyentes como a no creyentes 

Teresa de Calcuta, una mujer cuyo nombre real era Agnes Gonxha Bojaxhiu, nació en Macedonia el 25 de agosto de 1910 y  llegó a la India, a Calcuta, el 6 de enero de 1929, a la edad de 18 años, siendo una monja de la Orden de Loreto. Y con el tiempo se convirtió, gracias a los medios de comunicación, no a sus obras reales, en un mito intocable de occidente. Supuestamente hablamos de una persona que ha dedicado su vida a los demás, aunque curiosamente no ha mejorado la vida de los demás, especialmente de los más pobres. No obstante, criticar a esta mujer suscita rechazo en nuestra sociedad occidental y quien lo haga será calificado como insolidario, injusto o cualquier otro calificativo que muestre una mala intención de una persona hacia una pobre y anciana mujer que no ha hecho mal a nadie y que buscaba ayudar a sus semejantes. No se podría caer más bajo. También las críticas irán en el sentido de una visión anticatólica, aunque sus mayores críticos estén precisamente dentro de esta institución religiosa; porque esta religiosa fue profundamente reaccionaria, oponiéndose por ejemplo al Concilio Vaticano II, y fue también, y esto la califica como lo que realmente fue, tremendamente megalómana, centrando su obra y su trabajo en agrandar su propia figura y ego personal, y no en una mejora real de la situación de los pobres, no solo en la India, con las enormes cantidades de dinero que fluyeron hacia su orden y proyectos.
Cualquier crítica de la Madre Teresa provoca airadas y enfurecidas respuestas, no sólo de los ricos que buscan a la Madre Teresa para sus indulgencias, sino de gente bien intencionada y honesta. Invariablemente, algunos acusan a los críticos de ser "anticatólicos".
Pero muchos de los más decididos críticos de Madre Teresa son misioneros católicos, que han entregado sus vidas para trabajar con los más pobres entre los pobres. Ellos nunca buscan recibir la adulación de las corporaciones transnacionales de comunicación, y ellos son a menudo asesinados por escuadrones de la muerte de los gobiernos porque rechazan enseñar a los pobres a aceptar su destino.1
 El dinero llegaba a raudales, movido por una sutil y poderosa campaña de supuesta beneficiencia
Los donativos siguen llegando a las Misioneras de la Caridad. Vienen de todo el mundo y proceden de gente de buena fe, que, movidas por un acto de altruismo, momentáneo o no, envían sus cheques o giros para ayudar en lo que ellos están convencidos de que es una buena causa: Ayudar a los pobres en Calcuta. 1
Pese a todo esto, un supuesto Papa "progresista", si es que ha habido o hay alguno, va a proceder a canonizarla. Ya fue beatificada por otro Papa, Juan Pablo II, muy reaccionario, en el año 2003. Son cosas de la Iglesia Católica, pero la Iglesia, que se cree en posesión de la verdad y en ser rectora moral, nos querrá poner el ejemplo de esta mujer a todos: católicos, protestantes, ortodoxos, budistas, hinduistas, musulmanes, agnósticos, ateos..., o personas simplemente no religiosas (lo digo porque se puede ser ateo y ser religioso, negar la existencia de un Dios-es y aceptar la creencia en la existencia de almas o espíritus).
Como nos indica Christopher Hitchens, un autor con un bagaje intelectual con altibajos, pero que en el trabajo sobre Teresa de Calcuta (The Missionary Position: Mother Teresa in theory and practice) realizó una obra de enorme calidad periodística, contrastando la teoría ampliamente difundida con la práctica real, cómo alguien osaría a criticar a tal eminencia. Eminencia si nos atenemos a su fama, a su publicidad, nunca mejor dicho; pero en muy claro contraste con su obra real, con lo que se puede comprobar basándose en los hechos. Del mismo modo, otros muchos autores, pese al tabú existente para críticar a esta religiosa convertida en símbolo sagrado, ofrecen lo que los rayos de luz de la sinceridad de las personas que allí y entonces vivieron, en Calcuta, nos cuentan:
Pero ¿alguien se atrevería a tener dudas, cuando se refiera a una mujer menuda que es un monumento para la humanidad moderna?
Si uno viaja a Calcuta, las dudas surgen de inmediato.
Tomemos de ejemplo a Samity, un hombre de 30 y tantos años, sin dientes, quien vive en los barrios miserables. Él es uno de los 'pobres entre los pobres' a quienes se suponía que la Madre Teresa había dedicado su vida. Parado con una bolsa de plástico en las manos, hace cola de un kilómetro de largo junto con miles de otros pobres, en la Calle del Parque en Calcuta. Los pobres esperan pacientemente hasta que los ayudantes les arrojan arroz y lentejas a palazos dentro de sus bolsas. Pero contra lo que se pudiera esperar, Samity no obtiene su escasa pitanza de la institución fundada por la Madre Teresa —de hecho, nunca la ha obtenido— sino de la Asamblea de Dios, una fundación norteamericana de caridad, la que sirve 18,000 comidas cada día.
"¿La Madre Teresa?", responde Samity. "Aquí no hemos recibido nada de ella. Y pregunta en los barrios pobres, a ver si alguien ha recibido algo de esas hermanas acá. Dudo que encuentres a alguien".
Pannalal Manik se hace preguntas. "No comprendo por qué ustedes, gente occidental educada, ha hecho una diosa de esta mujer". Manik nació hace más de 60 años en el barrio pobre de Rambagan, que con sus 300 años de existencia es el más antiguo de Calcuta.
Lo que Manik ha logrado, muy bien puede ser calificado como un auténtico milagro.
Él ha construido 16 edificios de departamentos en medio de la miseria, proporcionando un espacio para vivir a 4,000 personas. El dinero para los materiales de construcción, equivalentes a 16,000 dólares por cada edificio de departamentos, fue solicitado insistemente por Manik a la Misión Ramakrishna, una organización hindú de caridad, la más grande de asistencia social en India. Los habitantes de esa villa de miseria construyeron con sus propias manos los edificios. Esto ha pasado a convertirse en un modelo para toda la India.
Pero ¿y qué colaboración obtuvo este filántropo de la Madre Teresa?
"Fui a verla tres veces," dijo Manik. "Ni siquiera quiso escuchar lo que tenía que decirle. Todos en el mundo saben que las hermanas tienen muchísimo dinero, ¡pero nadie sabe lo que hacen con él!"

No es extraño que en Calcuta existan cerca de 200 organizaciones de caridad ayudando a los pobres. Lo que extraña es que las Misioneras de la Caridad de la afamada Madre Teresa, no se hallen dentro de las mayores colaboradoras en servicios de caridad, lo que contradice la imagen pública mundial de la organización. 3
El estudio sobre el trabajo o actitud de esta religiosa es más detallado de lo que aquí en occidente solemos conocer. Uno de estos estudiosos es alguien que nació y vivió allí,  en Calcuta (Kolkata es el nombre actual), Aroup Chaterjee.
El nombre "Madre Teresa" estuvo y sigue estando ligado a la ciudad de Calcuta. Los admiradores y contribuyentes en todo el mundo de la ganadora del Premio Nobel, están convencidos de que su organización debe ser la más activa en esa ciudad, en la lucha contra la pobreza. Pero no es así.
"Son absolutas mentiras", dice Aroup Chatterjee. Es un médico que vive ahora en Londres y nació y creció en Calcuta. Chatterjee, después de trabajar por años en todo lo relativo al mito de la Madre Teresa, publicó un libro que ha sido reconocido como autorizado y con información verídica: Madre Teresa: Veredicto Final.
Chaterjee condujo su investigación in situ; entrevistó personalmente a numerosos testigos y peinó de arriba a abajo los discursos y declaraciones de la celebrada católica. "Donde quiera que buscara, sólo encontraba mentiras. Por ejemplo, la mentira acerca de las escuelas. La Madre T frecuentemente decía que ella dirigía una escuela en Calcuta para más de 5,000 niños. ¿Cinco mil niños? Debió haber sido una escuela gigantesca, quizás la más grande en toda India. Pero ¿dónde está esa escuela? Yo nunca la pude encontrar, ni conozco a nadie que la haya visto jamás" -reveló Chatterjee. 
La Madre Teresa siempre decía que recogía gente de las calles de Calcuta, pero ni ella ni su orden de monjas hacían eso. Cuando la gente les solicitaba ayuda, les decían cortantes que marcaran el teléfono 102 (similar al 911 de emergencia en Estados Unidos), que nada tiene que ver con orden religiosa alguna porque es del gobierno. 
Aunque la orden posee varias ambulancias que les fueron donadas, éstas son utilizadas sólo para transportar a las monjas a los lugares de oración y no recogen a ningún enfermo ni herido.

La Madre Teresa decía que su orden alimentaba 4,000; 5,000; 7,000 ó 9,000 habitantes pobres de Calcuta todos los días (el número variaba). Las tres cocinas de la orden en Calcuta sirve un máximo de 300 raciones de sopa al día. Y no sólo eso: Las cocinas sólo entregaban sopa a quienes poseían "tarjetas de comida", que eran distribuídas preferentemente a los pobres que eran católicos, que son minoría en la India.

Aunque la orden que fundó la Madre Teresa tiene algo de presencia en muchos países del mundo, en la mayoría de locales se preparan monjes o monjas, no son para ayudar a los pobres. 
Los refugios de la Madre Teresa usualmente sólo ayudan a los niños si sus padres firman una forma de renuncia a su patria potestad y la ceden a favor de la organización. 

La Madre Teresa afirmaba continuamente que sus clínicas para la familia natural prevenían embarazos no deseados, pero los números que reportan no son reales. 

La Madre Teresa enseñaba insistentemente que el sufrimiento era bello si se evocaba el sufrimiento de Cristo; sin embargo, cuando enfermaba, sólo se internaba en exclusivos y lujosos hospitales para tratarse. 3, 4
En su introducción a su libro Mother Teresa: The Final Verdict, 5 comenta la mala imagen que se ha creado de Calcuta en el mundo occidental, visto como un lugar de miseria indescriptible en el que la gente, que se muere de hambre en la calle, es recogida y cuidada por estas laboriosas monjas dirigidas por la Madre Teresa. Sin embargo, el día a día de Calcuta era muy diferente: una ciudad vibrante, con gente moviéndose de aquí para allá, con vida, cultura, negocios, mercados y, claro, también pobreza, como la hay en Nueva York o en el mismo Madrid; pero en modo alguno reflejando esa imagen fraudulenta que tanto ha conmovido como engañado a los habitantes de Europa y Norteamérica. El autor comenta como él mismo, que tuvo una actividad solidaria en su juventud y se preocupó por los más pobres y necesitados en su ciudad, no oyó ni vio nunca a esta orden de monjas. Es más, su sorpresa fue mayúscula cuando abandonó su país y se traslado a Gran Bretaña, donde Teresa de Calcuta era el mito que conocemos haciendo un enorme bien y cuidando de los pobres abandonados de su ciudad. Pónganse en su lugar y vean qué opinión puede tener alguien así de nosotros, los supuestamente más avanzados y sabios, ciudadanos occidentales. Una opinión nada buena, sino compasiva hacia nuestra ignorancia acompañada de importantes dosis de hipocresía, el verdadero sello occidental. La propia mujer de Chatterjee, criada en Irlanda y enseñada también bajo el mito creado sobre esta mujer, animó al investigador  a realizar esta obra sobre la figura de la monja europea, al ver el escandaloso contraste de lo ampliamente difundido en su país con lo que ella mismo comprobó en el lugar de origen de las supuestas buenas acciones.
El mito de Teresa de Calcuta nos debe hacer pensar en el poder e influencia que tienen los medios de comunicación sobre nuestro pensamiento. Así, en este caso tenemos que se llega a un punto en que hoy en día uno puede criticar la figura de Dios, pero tiene problemas si lo hace con la figura de esta mujer, aunque en un caso estemos hablando de una idea y en el otro de un ser humano cuyos actos y pensamientos pueden ser claramente contrastados y no estar sometidos, si se quiere, a una interpretación subjetiva.
Criticar a esta persona, basándose en evidencias concienzudamente contrastadas, no significa atacar a las personas que dedican buena parte de su vida al bien común, no significa atacar a ninguna religión, por supuesto no a la católica, no significa ser una persona ruin y sin moral, significa simplemente ser sincero y objetivo. Y esto, por muchas críticas que este autor y otros reciban, es algo encomiable que debe ser llevado a cabo.
La verdad os, nos, hará más libres. La mentira la dejaremos para los que quieran vivir, vilmente, engañando a otros para obtener el provecho propio. Y ni en nombre de la religión ni en el de la caridad puede en modo alguno esto admitirse. 

PS:
La segunda parte sobre este tema pueden verla aquí: Teresa de Calcuta: el mito continúa. Parte II

  Notas:
1. Mark Cook. Mother Teresa-She can´t put us out of our misery any more.
 http://www.ibiblio.org/prism/oct97/mothert.html#sidebar
2. Papa Francisco canonizará a la Madre Teresa de Calcuta. BBC.18.12.2015.
3. Walter Wuellenweber. Mother Teresa: Where are her millions? Stern. 10.09.1998.
4. Aroup Chatterjee. Mother Teresa, The Mother of All Myths. 6.5.2004.
5. Aroup Chatterjee. Mother Teresa: The Final Verdict. Meteor Books. 2003.

sábado, 19 de diciembre de 2015

La objetividad en el periodismo

Michael Parenti, un estudioso de los medios de comunicación y su influencia en nuestro mundo

La objetividad, el tratar de reflejar lo que percibimos de la forma lo menos influenciada  y condicionada posible, buscando respetar lo más fielmente que se pueda los hechos, no es un tarea fácil. En primer lugar no por solo las limitaciones de nuestra naturaleza perceptiva, más válida y poderosa que lo que habitualmente creemos, sino principalmente por ese filtro cultural-social que evita que ideas y hechos fundamentales sean desechados sin ser siquiera tenidos en cuenta. Es muy común verlo en personas con una enraizada creencia de clase, de estatus social, especialmente en aquell@s que pertenecen a familias poderosas y propietarias de los bienes económicos. Estas personas no admiten que se pueda hablar de un mundo con igualdad de oportunidades, sin amos ni sirvientes. Este ejemplo que les expongo nos servirá de gran utilidad para entender la objetividad en el periodismo, al ser los dueños de los medios de comunicación miembros de esas "clases altas", con un profundo sentimiento y pensamiento clasista.
Así, lo que se establece como aceptable, normal o incluso objetivo es el resultado que se produce en muchos ámbitos de la influencia de esas influyentes fuerzas que dirigen nuestras sociedades. A la cabeza de las cuales están esas familias dominantes. Salirse de estos, muchas veces demasiado estrechos, márgenes de pensamiento y comportamiento marcados, puede suponer y supone para el que lo haga un severo castigo; por muy basadas que estén las observaciones realizadas en hechos bien fundamentados. Castigo que pocos querran sufrir, aunque esto suponga el abandono de la propia independencia y la completa sumisión. Algo que a la larga se paga con frustración y malestar personal. La desobediencia se paga, la obediencia también, aunque de  forma diferente.
De este modo, en este mundo periodístico dominado por el poder económico, hoy en día prácticamente todo él, las opiniones de supuestos "expertos" con vínculos e intereses con los dueños reales del medio, son tratadas como objetivas y en primera plana. En cambio, no ya las opiniones, sino los hechos que no favorecen esta visión de las cosas y los grandes intereses que hay detrás de ellas, son habitualmente ocultados o también tergiversados, deformados, hasta difamados, para hacerles perder el valor real que verdaderamente tienen de cara al público. Público que si no es crítico o no conoce a fondo de lo que se habla, lo que es habitual, acabará no teniéndolo en cuenta, desechándolo o en el peor de los casos haciendo mofa o burla de tales hechos o de aquell@s que tengan el valor de defenderlos.
Este autor que les escribe ha pretendido alguna vez aportar un poco de información sobre los acontecimientos que suceden a nivel internacional enviando escritos a los medios corporativos e incluso a algunos que se definen como alternativos, dada la desinformación generalizada que existe en prácticamente todos ellos en estos aspectos. En vano y lo entiendo: aportar en estos periódicos, radios o televisiones solo una brizna de verdad con claridad podría ser demoledor para su postura editorial, quedando en clara evidencia de cara a sus lectores, oyentes o espectadores. 
El periodista que trabaja para estos medios, muy consciente o no tanto, desempeña un papel con unos límites bien marcados a la libertad de expresión y, por tanto, a la objetividad.
Tanto si ellos conscientemente  reconocen o no los parámetros ideológicos dentro de los cuales operan, los periodistas no persiguen aquellas preguntas que rozan contra los límites ideológicos de sus patronos. Estas incluyen: ¿Por qué están la riqueza y el poder tan desigualmente distribuidos entre clases dentro de las naciones y entre las naciones desarrolladas y el tercer mundo? ¿Por qué las corporaciones tienen tanto poder y la gente tan poco? ¿Por qué hay tanto desempleo, carencias e inseguridad económica en tantos países en los cuales se dice que el capitalismo funciona tan bien? ¿Por qué los Estados Unidos necesitan una red global de bases militares alrededor del mundo? ¿Y por qué los líderes de EE.UU. son hostiles hacia cualquier nación que planea un rumbo independiente, uno que podría no estar de acuerdo con los intereses de los inversores de las corporaciones multinacionales? En su dedicación a la "objetividad", los periodistas nunca se acercan a tratar con las realidades detrás de tales preguntas. 1
Estas preguntas expuestas son básicas y cruciales si uno quiere responder a los problemas económicos y sociales, y entender el mundo en el que vive; porque van a las causas raíces de dichos problemas. El que el periodista no se las plantee, al menos a nivel público, es debido al negado pero muy existente adoctrinamiento, cuando no temor, profesional y social. El resultado de tal temor y adoctrinamiento es uno nada ejemplar, ni a nivel de profesión ni a nivel personal; pues se anula tanto al periodista, y su objetividad, como a la persona.
La actitud que los califica [a los periodistas] , según he podido comprobar, es la falta de crítica y la subordinación que permite a los profesionales adoptar la ideología de sus jefes y sintonizar debidamente las opiniones con las que desempeñan su labor. El profesional resultante es un pensador obediente, una propiedad intelectual en la que el empresario puede depositar su confianza para que este cree, innove y exponga opiniones, sin riesgo de rebasar los límites de la doctrina predominante. La actual cortedad de miras intelectual y política del personal más cualificado no es fruto del azar. 2
Tenemos pues, que la "objetividad", objetividad entre comillas, consiste en no contradecir o cuestionar las intenciones de nuestros dirigentes, a las que se supone, con todas las evidencias en contra, como benévolas, bien intencionadas. Lo más que se puede o se atreve alguien a poner en entredicho es la forma o a esta o aquella persona prescindible, pero no el fondo del asunto; como es por ejemplo la amoralidad y alegalidad, a nivel internacional, de la intervención política, militar o económica en la soberanía de otras naciones o del silencio de como los enormes monopolios económicos controlan nuestros gobiernos, anulando cualquier expectativa de democracia real y, por tanto también, de progreso social.
La objetividad periodística, lo queramos saber o no, afecta a nuestras vidas.

Notas:
1. Michael Parenti. Inventing Reality. The Politics of News Media. St. Martin's Press. 1993. pp. 51-55.
2. Jeff Schmidt. Disciplined Minds. Rowman&Littlefield Publishers inc. 2000.

martes, 15 de diciembre de 2015

Venezuela: reflexiones de una involución electoral

El Presidente de Venezuela afronta una nueva etapa tan difícil como interesante y peligrosa. De su decisión y de aprender de experiencias pasadas dependerá su futuro y el de muchos venezolanos 

Celebradas las elecciones parlamentarias en la República Bolivariana de Venezuela este 6 de diciembre de 2015, podemos ver unos resultados que reflejan algo típico en sistemas y sociedades donde ha habido un desafío al poder imperante. 
En primer lugar les voy a comentar los resultados y posteriormente les hablaré de ese comportamiento más o menos típico o habitual cuando se desafía al poder en la sombra, al poder económico.
Tenemos que la amplia coalición que trata de desgastar al movimiento bolivariano de Venezuela (encabezado por el PSUV), conocida como la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), ha obtenido 112 escaños de los 165 de la Asamblea Nacional; una mayoría que supera los dos tercios, lo que le posibilitará tener capacidad para poder realizar reformas: incluidas la elaboración y rechazo de leyes orgánicas, sustituir magistrados de la Corte Suprema, nombrar los jefes del Consejo Electoral Nacional o de la oficiana del Fiscal público, e incluso proponer la reforma constitucional. 1 En estas elecciones la MUD ha obtenido 7.707.422 votos, en el año 2010 obtuvo 5.320.364, casi dos millones y medio de votos (2.387.058) más que antes. El ahora denominado Gran Polo Patriótico Simón Bolivar tiene 5.599.025 y antes tenía, con denominación como Partido Socialista Unido de Venezuela, 5.423.324. En estos resultos habría que tener en cuenta la variación de la población en estos cinco años, pero ya a simple vista se ve que la oposición al movimiento político encabezado por Nicolás Maduro ha crecido, mientras su partido se ha mantenido más o menos en su nivel. La pregunta es entonces: ¿por qué ha ocurrido esto?
Es normal que quien ya lleva tiempo en el poder tenga cierto desgaste, ocurre en todo momento y lugar. Porque recordemos que el gran político y estadista Hugo Chávez, el gran motor del cambio en Venezuela y el político más importante a nivel mundial de las últimas décadas, fue llevado a la presidencia de este país en el año 1999, ya hace, nada más ni nada menos, que diecisiete años de aquello, diecisiete intensísimos años. Así, ya saben que no es lo mismo predicar que dar trigo, predicar y prometer resulta una tarea fácil siendo oposición. Junto a este desgaste del tiempo, tenemos la pérdida irreparable como fue la del enormemente carismático Hugo Chávez; apenas han pasado dos años de su muerte y el primer gran varapalo e involución electoral ha ocurrido. Cierto es que un hombre solo no hace todo, pero cierto es también que sin alguien como Chávez el desarrollo político y sobre todo social de Venezuela no hubiese sido posible. Porque lejos de ser un producto mediático, como es por ejemplo el presidente de los Estados Unidos Barack Obama, el venezolano tenía una sólida formación política e histórica, tenía un gran bagaje en ambos sentidos, algo que no podemos decir de nuestros políticos occidentales. Además, y esto es lo llamativo de Chávez, había una correlación entre discurso y obra, entre palabras y hechos. Lo expresa correctamente el historiador norteamericano Michael Parenti:
 Millones de sus compatriotas perciben correctamente a Chávez por ser el único presidente que ha prestado alguna vez atención a las zonas más pobres de la nación. Su gobierno representa una forma completamente diferente de organización social, en la cual las naciones del mundo deberían poner a la gente por delante de los beneficios, usando la riqueza de la nación para servir a la población trabajadora en vez de a los pocos privilegiados. 2
Este y no otro fue el principal motivo por el que este presidente de Venezuela fue elegido una y otra vez, batiendo tanto un récord en las presidencias como en los logros sociales y en la congruencia.
Pero como decíamos, Chávez ya no está y pese a que el movimiento bolivariano tiene una gran base social, también ha sido utilizado por muchos para sus intereses particulares, se dicen revolucionarios pero piensan solo en su beneficio, hacen loas a la revolución pero no creen en absoluto en ella. Además, además de estos, tenemos aquellos, presentes también en  toda época  y lugar, que medraron y se instalaron allí no para mejorar el país, sino para una labor de zapa, de poner zancadillas, de crear malestar en la población hacia su gobierno. Son los habituales saboteadores, los quintacolumnistas que tienen como misión dañar a quien dicen defender o por quien dicen trabajar. En los dos casos, tanto en el de los interesados y aprovechados como en el de los correctamente denominados traidores o topos, el actual Gobierno venezolano y el PSUV tienen una necesaria y urgente tarea de limpieza. En sus manos está.
Por supuesto, no olvidaremos el prominente chantaje llevado a cabo por sectores empresariales para hacer daño donde más le duele a la población: en el suministro de los bienes y necesidades básicas, como es por ejemplo la alimentación. Este chantaje económico fue denunciado y también perseguido por el Gobierno de Maduro, haciendo un paralelismo correcto con lo que en su día le hicieron a Salvador Allende en Chile, allí Allende fue atacado de todas las formas posibles: destrucción de cultivos, eliminación y robo de ganado, paros de transportistas, etc, etc. Aquí en Venezuela se ha hecho del mismo modo un grave quebranto a muchas familias, haciéndoles pasar un tiempo necesario para otras tareas y actividades necesarias en colas interminables para poder tener lo básico. Esto, lo reconozcamos o no, duele mucho y afecta mucho a quien lo sufre, y casi diría que hará todo lo necesario porque esto no vuelva a tener lugar. Incluso dar el voto a quien en condiciones normales nunca lo hubiese hecho. La desesperación lleva a medidas drásticas, casi siempre muy negativas. Tan negativas como el dar más poder a aquellos que han sido los causantes del problema, el empresariado expresado en los partidos de la oposición, y atacar al gobierno, que era quien estaba haciendo lo posible, seguramente debería haber hecho más, porque no hubiese estos problemas de suministro de productos básicos. Aquí también tiene el Gobierno de Venezuela una tarea urgente: ser más efectivo y resolutivo en la persecución y castigo de estos criminales sociales y económicos.
Junto a todo esto dicho, que creo está bien dicho, no deberíamos seguir añadiendo más medidas o contramedidas económicas sin antes hablar del aspecto moral e intelectual de las personas. Pues una persona no solo debe ser un ente consumidor satisfaciendo sus instintos básicos. Porque si convertimos la política en un mercadillo en el que los partidos juegan a ver quién es el que te da más, estaremos creando ciudadanos caprichosos y egoístas, del mismo modo a como se maleduca a un hijo en el que los padres están reñidos y tratan de ganarse a este hijo a base de regalos y no de educarlo, formarlo y hacerle valorar las cosas y las personas, cosas y personas que se ganan con dedicación y cierto sacrificio. En esto sí ha pecado la política del Gobierno de Venezuela, porque muchos de sus habitantes creían y creen que las mejoras sociales: la vivienda, la atención sanitaria, la comida, la educación gratuita, el elevado sueldo mínimo, etc, etc, están garantizadas, que son un derecho que no se puede perder. Del mismo modo pensaban muchos europeos y ahora están viendo y sintiendo en sus carnes la diferencia entre una realidad, a la que han contribuido a generar, y lo que los vacíos discursos decían y dicen. Los venezolanos mejor que nadie deberían conocer esto, porque antes de la llegada de Chávez las cosas eran muy pero que muy diferentes y no en sentido positivo, sino en el negativo de una enorme masa de población dejada a su suerte, es decir a la pobreza, la penuria y el abandono crónicos. Falta por tanto y es necesario un serio programa de formación y de educación, y sobran facilidades y regalos a gente que no se lo merece y no se lo ha ganado. Nunca se debe dar algo por nada. Lo dice el dicho latino "Do ut des" (Doy para que des).
Tampoco olvidaremos la que es casi una ley social: quien tiene el poder económico acaba teniendo, tarde o temprano, el poder político. Venezuela no es ninguna excepción a esta regla. Los grandes propietarios, además de esa guerra económica descrita antes, han desatado una guerra multifrontal. Entre esos frentes tenemos el mediático, el de los medios de comunicación. Encargardos de difamar y demonizar a las personas que no quieren y de falsificar los hechos o de ocultarlos. Así, si los magnates tienen el control casi completo, como lo tienen en Venezuela, más pronto que tarde acabarán embaucando y engañando a la población. Como efectivamente ocurre. Veamos la situación mediática en Venezuela, donde y pese a los avances, con incluso ley de medios, la desigualdad es escandalosa en beneficio de los que más tienen y en perjuicio del conjunto de la gente:
Los medios privados venezolanos están en un proceso de sostenida expansión que desmiente la idea de que el Estado les imponga frenos o cortapisas. Citemos cifras contundentes de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones. Para 2012 circulan 334 publicaciones periódicas; de ellas un centenar son cotidianos. La mayoría son abiertamente opositoras al Gobierno. Sólo dos guardan un relativo equilibrio en la información, según mediciones del comunicólogo opositor Marcelino Bisbal: Últimas Noticias (Caracas) y Panorama (Maracaibo). Apenas tres (03) diarios, aparecidos en los últimos años, no son opositores: Diario Vea, Correo del Orinoco, y Ciudad Caracas. 
Para 1998 funcionaban 331 emisoras de FM comerciales privadas y apenas 11 de servicio público. Para 2012 estas cifras casi se duplican: hay 499 emisoras FM comerciales, 83 de servicio público y 247 comunitarias. En 1998 emitían en señal abierta 36 televisoras comerciales y 8 de servicio público; para 2012 las cifras casi llegan al doble, pues funcionan 67 comerciales, 13 de servicio público y 38 comunitarias. Advirtamos que las emisoras comunitarias tienen alcance limitado a una parroquia o un distrito, y que su existencia a veces es efímera. 3
Es cierto que unas personas organizadas y concienzadas, que vamos a ser sinceros nunca es la mayoría de la población, pueden resistir y contrarestar esta injusta desigualdad, como de hecho ha ocurrido en Venezuela, pero como en todo hay límites y finalmente la balanza se decanta por el lado de más peso.
Todos los medios de comunicación de Venezuela, prácticamente todos, están en contra del gobierno bolivariano. Que éste haya ganado prácticamente todas las elecciones, en alguna forma da cuenta de cómo el pueblo tiene claridad y puede derrotar la mentira de los medios. 4
No nos engañemos más, unos medios de comunicación presentes en todo momento y lugar, de forma masiva y también compulsiva, acaban modelando la opinión social; de forma que lo que dicen los medios se acaba convirtiendo en el tema de conversación y también en el de pensamiento. Incluso aquellos que no creen en esta influencia no son conscientes que lo que ellos hablan, y hasta cómo hablan y para qué hablan lo están recibiendo de esas grandes estructuras comunicacionales. A este respecto les recomiendo este artículo sobre la modelación de nuestra opinión por los medios de comunicación: Cómo los medios de comunicación modelan nuestra opinión .
Asimismo quien detenta el poder económico puede comprar voluntades y, claro, puede comprar y compra votos (de muy diversas formas y muy diversas formas de agradecimiento), aquí y en Venezuela. Es difícil, por no utilizar la palabra que se debía haber utilizado, imposible, que en una sociedad dividida entre un grupo de propietarios y un conjunto, variopinto, de desposeídos pueda haber una democracia real, porque si esta comienza a existir en verdad, pronto muere, y no por muerte natural, sino por muerte provocada. Es la situación que tenemos en Venezuela, una minoría opulenta, privilegiada y caprichosa con un hondo sentimiento de clase, que no tolera que aquellos "desarrapados", "muertos de hambre" que "no tenían donde caerse muertos", comiencen a tener derechos y medios para ejercer esos derechos. Parece que les ha llegado su hora, pese a que la oposición cuente con gente y opiniones de que hay que llevar un cambio gradual, los "gradualistas", porque la mayoría de sus votantes y los que no son sus votantes verían con muy malos ojos la eliminación o destrucción de las muy importantes mejoras sociales; están otras personas y pensamientos, más poderosas, que ven llegado por fin el momento de acabar con esa pesadilla de apoyo  a los más desfavorecidos y proponen acabar con todo el legado de Chávez cuanto antes, son los "maximalistas". Digamos que no lo tendrán fácil, porque el legado de Chávez ha calado y sigue, muy a su pesar, vivo.

PS: 
En este artículo pueden ver los grandes errores del Gobierno venezolano en su política económica, social y también judicial. Lo repetimos, lo que se consigue sin sacrificio no se valora, y aquí el gobierno se pasó de benévolo y la gente no se lo agradeció.

Regalos sin navidad

Notas:
1. Lucas Koerner. Facing Opposition Onslaught, Chavismo must return to roots. Venezuelanalysis.com. 9.12.2015.
2. Michael Parenti. The face of imperialism. Paradigm Publishers, p.118.
3. Luis Britto García. La libertad de expresión en Venezuela. Primera parte.  América XXI. Noviembre 2012.
4. Es falso que en Venezuela exista una dictadura: Luis Britto. La Jornada, 27.04.2014.

jueves, 10 de diciembre de 2015

La autodestrucción de la izquierda. Parte II: Los intelectuales y los políticos

Noam Chomsky

Los apodados como "intelectuales", esas figuras que supuestamente por sus conocimientos e incluso por su integridad moral velan por mantener un discurso crítico con el poder o poderes que rigen nuestra sociedad, para que no devengan en tiranías, suelen ser un mito más que se construye y mantiene en la organización social. Siendo su papel real no ese indicado, sino aquel en el que simulan hacer esto, pero hacen lo contrario, fortalecer y salvar a los poderes que dicen criticar. Si continuamos con la entrevista a Jean Bricmont que comentábamos en la Primera parte, vemos que nos habla sobre ellos, los intelectuales:
El problema con los intelectuales es que les encanta pretender que son críticos del poder cuando en realidad lo legitiman. Por ejemplo, lamentarán que nuestros gobiernos occidentales no hacen lo suficiente para promover nuestros valores (a través de intervenciones y subversiones), lo que, por descontado, refuerza el concepto de que “los nuestros” o “nuestros gobiernos” hacen eso de buena voluntad, algo de lo que conviene dudar, como trato de explicar en mi libro.
Estos intelectuales en ocasiones son criticados, ¿pero por quién? En general por figuras marginales, creo. Siguen dominando en los medios de comunicación y en la esfera intelectual. 1
Esto ustedes creo que lo han visto multitud de veces en esos debates o tertulias aburridísimos que no aportan nada salvo el ser el modo de ganarse la vida de gente que lo único que hace es la pelota y el ridículo. Bien, son los medios corporativos y esa es su deplorable función. Sin embargo, el problema no se queda ahí, porque tenemos intelectuales reconocidos y considerados realmente críticos con las estructuras de mando, político y económico, que también se prestan a ello. Basta ver la actitud que ha tenido el lingüista y analista político norteamericano Noam Chomsky con la que se llamó como "Primavera Árabe". Término este  que fue puesto en escena por los neocón, alabando el papel de George Bush hijo en Oriente Medio en el año 2005 y resucitado cuando se preparó esa gran campaña de recolonización de esta zona mencionada y del norte de África conocida como "Primavera Árabe", y luego, cómo no, asimilado por la izquierda. 2 Para él (Chomsky) esto era algo fantástico que no había visto en tiempos, unas movilizaciones populares masivas exigiendo libertad, democracia y justicia social, ahí es nada. La realidad, menos ideal, mostraba un retrato completamente diferente: preparadas años atrás estas revueltas por la Administración estadounidense bajo la directrices de las corporaciones y siguiendo ejemplos de estrategias exitosas preparadas por ellos, como la de Otpor en Serbia. 3 Además, se echaría mano de organizaciones muy violentas e intolerantes, como los Hermanos Musulmanes o la propia Al Qaeda, para lo que el engaño no consiguiese, lo lograse el uso de la fuerza. Les recomiendo la siguiente información sobre el Origen de la "Primavera Árabe"
Hasta tal punto han ido intelectuales como Chomsky y otros, que se niegan a reconocer esa evidente realidad y se mantienen en esa imaginaria historia que les reconforta. Afortunadamente siempre habrá personas que velen por contar los hechos tal y como fueron, no según convenga. Dan Glazebrook reflejaba la disparatada e irresponsable conducta y postura del lingüista estadounidense:
...en una entrevista con la BBC, a un mes ya de rebelión -y, sobre todo, a solo cuatro días antes de la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU 1973 y del comienzo de la guerra relámpago de la OTAN- él [Chomsky] eligió calificar a la rebelión como "maravillosa". En otra parte él se refirió a la toma de la ciudad del este de Libia, Bengasi, por bandas racistas como "liberación" y a la rebelión como "inicialmente no violenta".4
 La tozudez de intelectuales tal y como el estadounidense Chomsky en mantenerse en esa postura, por ejemplo en la entrevista con Dan Glazebrook, 4 que lo que realmente hizo y hace es justificar una agresión militar externa contra un país soberano alterando la realidad a su capricho, nos hace ver que estos ídolos de la izquierda lo mejor que podían hacer muchas veces es simplemente no inmiscuirse; pues, como lo hacía ver Jean Bricmont, se convierten en legitimadores y valedores de los grandes magnates al reflejar incluso supuestas buenas intenciones donde solo hay intereses económicos y políticos.
Así, lo que ocurrió en Libia nada tuvo que ver con una revuelta popular y pacífica. Fue una insurrección promovida desde el exterior muy violenta, ya desde el comienzo, largamente preparada durante años.  Tal y como los mismos hechos atestiguaban:
La realidad muestra que los "manifestantes" eran en realidad insurgentes fuertemente armados que arrasaron secciones enteras de las paredes de hormigón armado de una base militar de Bengasi, y después se hicieron con el control de artillería pesada y de vehículos blindados antes de apoyar a los rebeldes armados en las ciudades y pueblos cercanos. 5
La actitud de estos "manifestantes", en verdad mercenarios, no se hubiese tolerado en ninguna parte del mundo, pero aquí, en Libia, estos eruditos querían que comulgásemos con ruedas de molino.
En realidad, la imagen completa de "manifestantes pacíficos siendo masacrados" estaba invirtiendo la realidad. De hecho, Forte indica, los rebeldes "quemaron comisarías de policía, entraron por la fuerza en los edificios de los servicios de seguridad, atacaron oficinas del gobierno y quemaron vehículos" desde el mismo comienzo, a los cuales las autoridades respondieron con "gas lacrimógeno, cañones de agua y balas de goma -muy similar a los métodos frecuentemente usados  en las naciones occidentales contra manifestantes mucho más pacíficos que carecen del elemento de sedición". Solo una vez que los rebeldes habían ya ocupado los edificios del ejército en Bengazi, robando sus armas y empezando a usarlas contra las fuerzas del gobierno, las cosas empezaron a intensificarse. 6
Tenía que ser precisamente un rival de Gadafi, el presidente de Uganda Yoweri Museveni, el que con el sentido común que les faltaba a otros expresaba lo sucedido de forma bien clara y cómo se debía actuar:
Cuando los alborotadores están atacando las comisarías de policía y las instalaciones del ejército con el objetivo de tomar el poder, entonces no son ya manifestantes; son insurreccionistas. Tendrán que ser tratados como tales. Un gobierno responsable tendría que hacer un uso razonable de la fuerza para neutralizarlos. 7
Un comportamiento similar, es decir, intentando cambiar la realidad e inventando un discurso de acuerdo o más acorde a interese particulares y a  lo que decían los medios de comunicación corporativos, seguían destacados intelectuales de la izquierda alternativa española, como son Pascual Serrano o Juan Carlos Monedero. En un escrito realizado por ambos: Que el miedo al imperio no nos paralice, publicado en Rebelión (Una página creada a propósito para controlar y engañar a la gente de izquierda, donde se mezclan artículos de calidad -ej. de Dan Glazebrook- para servir de gancho, con otros cuyo objetivo es confundir y desactivar a las personas y colectivos sociales. Como han hecho con el movimiento que se oponía a la guerra en Libia o Siria) indicaban: 
"Los levantamientos populares que se están sucediendo en los países árabes abren sin duda la peligrosa posibilidad de que despierten, e incluso faciliten, la intervención de las potencias occidentales vía OTAN, con la consecuente tragedia de ocupación, crimen y atropello a la soberanía que caracteriza las intervenciones de la Alianza y los Estados Unidos. 

Muy inteligentemente los gobiernos europeos han abandonado a los dictadores una vez comprobado que no pueden seguir manteniendo la farsa.
Mubarak, Ben Ali, Gadafi, escogieron un camino contrario a los intereses de sus pueblos y fueron arrastrados por el viento popular."  8
Bien, en el primer párrafo tienen razón muy parcialmente, ya que no hubo levantamientos populares prácticamente en ningún país, salvo algo que se vio en Bahréin o Arabia Saudí, más por imitación de lo que supuestamente estaba ocurriendo en otros países que por una inicativa preparada y propia de la gente de allí. Para comprender y comprobar esto que digo ver el artículo que he enlazado antes sobre El Origen de la "Primavera Árabe". Además, en el segundo párrafo no aciertan a ver lo que estaba pasando. Los líderes occidentales, nuestros tiranos, utilicemos la palabra apropiadamente, no abandonaron al verse en una  farsa; abandonaron y atacaron a estos gobernantes porque estaban haciendo cosas que no les gustaban, especialmente Gadafi. Habían cometido el delito de buscar la independencia económica de África, encabezados por el líder libio. Recomiendo estos dos artículos, sobre la figura de Gadafi y lo que estaba ocurriendo en el continente africano: Muamar Gadafi: luces y sombras y La guerra de occidente contra el desarrollo africano continúa. El tercer párrafo, al menos en el caso de Gadafi, es completamente falso. Si algo hizo su gobierno desde su llegada, tras una revolución real, fue mejorar la calidad de vida de los libios, hasta convertirlo en el país más desarrollado de África y mejor en muchos aspectos a la propia España ( ver este enlace: Una comparativa entre la democracia en Libia durante la época de Gadafi y la de España). 9
Como ven, la actitud de los intelectuales de izquierda es más perjudicial que beneficiosa, porque en vez de aportar buen juicio y una opinión rigurosa, justa y equilibrada, llevan a cabo una estrategia bastante reprobable: timorata, no atreviéndose a denunciar claramente las falsedades vertidas por los grandes medios de comunicación, y participando en los argumentos de la justificación para una agresión militar en vez de exponer claramente tanto su falsedad como su ilegalidad; además de ver buenas intenciones y buen fondo donde no lo hay, ya que quienes dirigen nuestras sociedades, especialmente los dueños de las corporaciones, no se mueven por motivos altruistas o humanitarios, sino por intereses egoistas de ambición de poder y codicia. No es extraño entonces que en occidente la izquierda lleve naufragada décadas, sin ser capaz de dar ninguna solución ni a los problemas nacionales ni, por supuesto, a los internacionales.
Como indica Bricmont, estos intelectuales de izquierda y sus actitudes son criticadas por otros intelectuales y analistas, pero tales denuncias y críticas serán censuradas por los medios de comunicación: los corporativos y los "alternativos" que mayor fuerza económica y de difusión tienen (que por algo la tienen).
En relación a los políticos, tenemos un caso muy ilustrativo y que va a servir de ejemplo de si la izquierda tiene alguna posibilidad futura, es del de  Jeremy Corbyn en Gran Bretaña. Aquí estamos ante un caso en el que las bases del partido han elegido a una persona que supuestamente no va a seguir los pasos nefastos de personas (o personajes) como Tony Blair y que tienen, parece ser, un historial de pensamiento y de acción anticolonial. Y esto es bueno verlo y testarlo, porque que en occidente aparezaca una figura política que ocupa un cargo de relevancia y puede ocupar una presidencia tan importante como la británica y que sea realmente anticolonial, sería una maravillosa novedad. Tal vez demasiado maravillosa para poder ser creída.
Corbyn y su partido, los laboristas, están aparentemente en una difícil situación: apoyar la estrategia de (supuesto) ataque al ISIS en Siria e Irak o no hacerlo y quedar como indecisos o incluso cobardes. Sin embargo, como aclara Christof Lehmann (uno de los mejores analistas políticos del mundo), la solución es más sencilla. 10 Más sencilla si se tiene la intención de actuar de forma honesta y valiente. Esta es: 
-  Mostrar con claridad, rigor y sinceridad el papel de su país en el fomento de la violencia en Siria y en esa organización mercenaria que es el ISIS. Como creo que conocen, Roland Dumas, que fue Ministro de Exterior francés, denunció públicamente como altos cargos británicos le propusieron dos años antes del ataque sobre Siria participar en el plan que tenían preparado contra este país. Él lo rechazó. Del mismo modo,  pueden denunciar que la destrucción de Irak ha posibilitado todo esto y no de forma indirecta o involuntaria, sino bien premeditada y pensada, tal y como se explica en el anterior enlace sobre el ISIS.
- En relación a esta participación internacional en estos bombardeos hay algo que curiosamente rara vez se plantea en occidente: ¿Qué legalidad hay para llevar a cabo tales acciones? Esto muestra y demuestra nuestras escasas convicciones sobre el respeto al derecho internacional y, en definitiva, a la libertad, la democracia y la paz, que van ligadas al primero. Corbyn puede denunciar que su país no es quién para bombardear en ninguna parte del mundo, ya se vio lo que hizo tantas veces antes: Irak, Libia..., y a que el Gobierno legítimo de Siria no le dio ningún permiso para hacerlo. ¿Cómo veríamos que Irán viniese a Inglaterra o Francia a bombardear estos países sin que nadie le invitase, solo porque le dio la real gana de hacerlo? Creo que lo veríamos mal.
La solución al problema de la violencia en Siria, al de la violencia terrorista islamista en general, es en verdad simple. Basta dejar de apoyar a estas organizaciones, de alimentarlas, de entrenarlas, de armarlas; pero, y aquí está el pero, entonces el poder económico, industrial y financiero, occidental perdería una de sus bazas principales para imponer sus criterios e intereses en el mundo sobre sus rivales (fundamentalmente las compañías rusas y chinas). Aquí debería estar el papel y la labor de Corbyn y de su partido laborista, aunque tengo la impresión de que no van a estar por la labor.

PS: 
Las críticas, justificadas, que aquí se vierten  contra figuras de la talla de Noam Chomsky o también Pascual Serrano, no tienen como fin desprestigiar su obra, que merece ser leída, sino hacer una observación necesaria hacia cierto comportamiento reprobable en no contar o en adulterar unos hechos, meridianamente claros, sobre aspectos relevantes de la política y la economía internacional, con unos efectos muy perniciosos sobre otros seres humanos como nosotros.

Relacionado con este artículo tienen este otro: El papel de los progresistas occidentales en la recolonización de África.

Chomsky y Democracy Now! siguen con sus falsificaciones y propaganda contra Siria.

Notas:
1.  La izquierda se ha autodestruido aceptando las intervenciones humanitarias. Entrevista a Jean Bricmont. Público. 25.11.2015.
2. Charles Krauthammer.The Arab Spring of 2005.The Seattle Times. 21.03.2005
3.  Tina Rosenberg. Revolution U. Foreign Policy. 17.02.2011.
4. Dan Glazebrook. Libya and the manufacture of consent. Al-Ahram, noviembre, 2011. 
5. Tony Cartalucci. US Libyan policy: zero legitimacy. Land Destroyer.
6. Dan Glazebrook. "Slouching towards Sirte" review. Divide and Ruin. 2013. p. 74
7.  Maximilian Forte. Slouching towards Sirte. NATO´s war on Libya and Africa. Baraka books, 2012, p.285.
8. Pascual Serrano y Juan Carlos Monedero. Que el miedo al imperio no nos paralice. Rebelión. 27.02.2011.
9.  Mikel Itulain. El "Déjà vu" de Pascual Serrano. ¿Es posible la paz?, 2.9.2013. Enlace
10. Christof Lehmann. Corbyn's Syria Quagmire: Testing Labour's Honesty. nsnbc.me. 28.11.2015.