jueves, 24 de enero de 2013

Cuándo saldrán los españoles de la crisis



Este artículo no tiene nada que ver con una profecía, con una idea teórica, este artículo habla del sufrimiento humano, de la incompetencia humana,  de la necedad humana, de la banalidad y la venalidad humanas, del egoísmo humano, de la irresponsabilidad humana, de la inconsciencia humana, de la maldad humana y de otras muchas cosas más. Habla de todo ello porque habla de la crisis que están sufriendo los españoles, los españoles de a pie, y está crisis tiene todas esas características humanas y unas cuantas más.
Los españoles, los españoles de a pie, repito, no saldrán de la crisis twiteando, tonteando o cenando en un McDonald´s. No saldrán de ella escuchando las voces de los amos que ahora les ponen las cadenas, me refiero a los medios de comunicación. Quien sigue los consejos  de quien le hace mal puede que merezca algo de ese mal. Tampoco saldrán de ella parloteando, quejándose y quejándose. En España es muy habitual, y también muy irresponsable, la táctica de la pataleta, que a nada conduce y no hace sino mostrar la falta de recursos y de valentía de quien la hace. Me quejo  pero al  rato hago lo contrario de lo que decía que se debía hacer o no hago nada de nada. Este discurso vacío se puede oír en cualquier bar. 
Los españoles saldrán de la crisis cuando sufran más,  cuando se enteren de una vez  cómo funcionan las  cosas, cuando se enteren quién es el que manda y quién el que se somete en una sociedad donde unos pocos son los propietarios y unos muchos son los siervos o algo peor. Los españoles  saldrán  de la crisis cuando despierten del sueño irresponsable y lamentable en el que vivían. Saldrán de ella cuando por primera vez en su vida empiecen a luchar y a defenderse, cuando luchen por primera vez en su vida con valentía y decisión contra los verdaderos responsables de su penuria.
El cambio social no vendrá porque un intelectual diga esto o aquello, porque un partido político corrompido trate de engañar a este y a aquel, el  cambio social vendrá de la lucha, de la lucha que surja del sufrimiento y de pagar en tus carnes tus propias irresponsabilidades y tu propia ingenuidad. De dejarse de palabras huecas y pasar a la acción.
Allende, el presidente chileno que  luchó hasta el final por un mundo realmente democrático y humano, por un mundo mejor, dijo algo que la mayoría de la juventud hoy no entiende, tal vez dentro de cinco años lo entiendan mejor:

 ...la revolución no pasa por la universidad, y esto hay que entenderlo, la revolución pasa por las grandes masas, la revolución la hacen los pueblos, la revolución la hacen, esencialmente, los trabajadores...

Los cambios sociales no vienen porque a la gente le da un punto, porque simplemente no le gusta algo, no, los cambios sociales, las revoluciones, vienen cuando el dolor, el hambre y hasta la muerte empujan a los hombres a cambiar algo que los mata. Los cambios no vienen con bonitas palabras, ninguno vino así. Hay profesores universitarios a los que les gusta hablar de Gandhi, pero no dicen el carácter racista de Gandhi hacia los de piel de color negra en África y de la guerra en la que participó él en el lado británico contra los nativos africanos, tampoco dicen que Gandhi no llevó la justicia social a la India, como hoy la está llevando Hugo Chávez a Venezuela.
Hoy en España a la gente se la humilla y se la puede humillar más y más. España no tiene una buena solución, no tiene un fácil porvenir, su gente no responde como debiera y son muy fáciles de engañar y de explotar.

El estado de bienestar nos ha vacunado contra la revolución. Siento simpatía absoluta por el 15 M pero hay que reconocer que su efectividad es nula. Si piensas que por agitar las manitas blancas los señores de los consejos de administración, que están al margen de cualquier crisis, van a cambiar de parecer… Los derechos se conquistan a base de sangre y lucha, pero vivimos una epidemia de buenismo que nos hacer creer que haciendo actos simbólicos vamos a conservar el trabajo. (1)

Los españoles han olvidado su pasado, su pasado de lucha y de dignidad, ahora prima más la inconsciencia y la irresponsabilidad. Todo esto hasta ahora, pero, ¿qué harán los trabajadores cuando el agua llegue al cuello de la mayoría de ellos?, ¿cuándo ya no haya esperanza? No subestimemos a los trabajadores españoles, los que levantan el país, los que hacen el país, los que son el país. Si no lo creen recuerden su pasado:

A largo plazo -y es importante recordar que sólo a largo plazo-, la clase obrera sigue siendo el enemigo más encarnizado del fascismo, por la sencilla razón de que es la que más ganaría con una reorganización decente de la sociedad.
A diferencias de otras clases o estamentos, no se la puede sobornar eternamente.

Con todo, eso no altera el hecho de que la clase obrera seguirá luchando contra el fascismo aunque los demás cedan. Un rasgo sorprendente de la conquista nazi de Francia ha sido la cantidad de defecciones que ha habido entre los intelectuales, incluso entre la intelectualidad política de izquierdas. Los intelectuales son los que más gritan contra el fascismo, pero un respetable porcentaje se hunde en el derrotismo cuando llega el momento. Saben ver de lejos las probabilidades que tienen en contra, y además, se los puede sobornar, pues es evidente que los nazis piensan que vale la pena sobornar a los intelectuales. Con los trabajadores sucede al revés: demasiado ignorantes para ver las trampas que les tienden, creen con facilidad en las promesas del fascismo, pero tarde o temprano siempre reanudan la lucha; y así debe ser, porque siempre descubren en sus propias carnes que las promesas del fascismo no se pueden cumplir. Para amordazar de una vez por todas a la clase trabajadora, los fascistas tendrían que subir el nivel de vida general, cosa que ni pueden ni probablemente quieren hacer.(2)

Cambien la palabra fascismo por neoliberalismo, muy similares en sus consecuencias sociales ya que son las mismas familias poderosas quienes lo dirigían y dirigen, (3) y verán lo que puede suceder tarde o temprano en España, sino al tiempo.
La necesidad, una vez más en la historia, mueve, moverá, a las personas.

 http://miguel-esposiblelapaz.blogspot.com.es/

Notas:
 (1) "Chabolas con Wifi": así será España en un par de años. Entrevista a Ramón Muñoz. El Confidencial, 12.12.2002.   Entrevista en RT: Enlace
(2) George Orwell. Recuerdos de la guerra civil española, 1942.
(3) Mikel Itulain. La influencia del poder económico en el auge del fascismoEnlace


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puede poner aquí sus opiniones, siempre con respeto y con ánimo de enriquecer y fomentar el debate.
Las personas que participen deberán identificarse con el fin de que asistamos a un debate e intercambio de opiniones en condición de igualdad.
Gracias-Mila esker-Thank you.