domingo, 19 de febrero de 2023

Se puede negociar con el régimen nazi de Ucrania?

 
Valery Zaluzhny, Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Un nazi al mando posando orgulloso con banderas, emblemas e imágenes nazis. Hace poco celebraba el aniversario de uno de sus criminales históricos, Stephen Bandera.


La pregunta que les hago conlleva importantes connotaciones que hacen chocar con estrépito nuestras supuestas buenas intenciones con las realidades de los hechos, también de nuestros propios hechos. Llegó el nazismo de nuevo a Europa y con él el drama ucraniano y pregúntense qué hicieron ustedes y las personalidades del mundo intelectual, económico, político, mediático, religioso o artístico, entre otros, para evitarlo. En el mejor de los casos y los menos, no hicieron nada, y en el peor, como una jauría desatada, contribuyeron a tal barbarie. Y luego intentan dar lecciones acusando a tal o cual persona, que no ostenta ningún poder real, por no haberse opuesto al nazismo de comienzos y mediados del siglo pasado. Vivimos la época de la hipocresía más que en cualquier tiempo pasado.

Occidente, como ya ocurrió entonces, vuelve a mostrar lo más siniestro de la sociedad humana. No cambió a mejor.

Y la pregunta la repito: puede negociarse algo con alguien que cree que otros seres humanos de una cultura diferente a la suya son inferiores y que deben ser exterminados o con aquellos que los promocionaron, financiaron y armaron?

La respuesta para una mente cuerda es clara: no, no hay que negociar, no se puede hacer salvo que uno mismo quiera condenarse a ser víctima de ellos. Hay que castigar sin contemplaciones tales actos y pensamientos.

No se derrota al nazismo en una mesa de negociación y menos cuando ha cogido tal fuerza que tiene secuestrada a la sociedad. Una vez que se le ha permitido brotar y se le ha abonado y regado para que crezca con vigor, labor esta responsabilidad otra vez más de tiránicas familias que dirigen el mundo capitalista a su capricho, la tarea es complicada y requiere el mismo o mayor uso de la fuerza que el que requirió para extender este monstruo. 

Ya les decía en un artículo anterior que el haber dejado otra vez a los países de occidente en las mismas manos con los mismos intereses que crearon el fascismo del siglo XX, era una cuestión de tiempo que lo volviesen a revivir cuando su locura de poder y codicia lo requiriese y desease. No han tardado ni 30 años para una vez caído su gran rival y la contención para que esto ocurriese, la Unión Soviética, volviesen a resucitar a esta bestia llena de odio y de violencia. Tampoco olvidemos que la estupidez y el egoísmo de personajes nacidos en el estado que derrotó a las hordas de Hitler, como Gorbachov, Yeltsin y otros dirigentes políticos, económicos y mediáticos, contribuyó, con su profunda traición y cobardía, a tal menester. La locura nazi de Ucrania no debió haberse repetido. Ya avisaban de lo que venía, si no se paraba a tiempo, todas las personas con experiencia pasada y con un mínimo de responsabilidad en sus cabezas. La construcción de monumentos y dar nombre a calles y avenidas a verdaderos criminales, como Bandera, y su veneración, junto al ocultamiento de los horrores pasados y sus siniestras fechorías a las nuevas generaciones, unido a la indecisión y corrupción de las nuevas clases políticas, crearon el medio de cultivo para lo que vino y tenemos. Llevado y escalado finalmente, como ya ocurrió, a un guerra mundial. Recordemos, mucho más peligrosa que cualquiera de las pasadas. De aquellos barros se crearon estos lodos que nos hacen hundirnos en ellos.

Es el sino amargo de la historia humana. Su estupidez y el no aprender nada de su existencia pasada los conduce a los mayores desastres. Sino que parecen no entender y por tanto incapaces de salir de él, los dirigentes de la Federación rusa actuales, porque si bien ellos no comenzaron ni provocaron la guerra, la cual abiertamente ya reconoce como su comienzo en 2014 hasta el Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, tienen su responsabilidad en no haber querido afrontar de una vez la realidad que tuvieron y  tienen delante de ellos.

No puedes tratar, como hace el Ministro de Asuntos Exteriores Serguei Lavrov, de "nuestros compañeros occidentales" a quienes buscan tu destrucción y la muerte de tu gente enviando armas letales a fanáticos sin escrúpulos. Tampoco puedes decir que te sientes decepcionado o engañado, como hace su presidente Vladimir Putin, aunque incluso esto se diga de forma retórica, cuando tras 8 años de unos Acuerdos de Minsk que occidente utilizó solamente para prepararse para la guerra, como reconocen sin tapujos sus firmantes, Ángela Merkel o Francois Hollande, te lancen una guerra masiva en tus fronteras tratando de desestabilizar y destruir tu nación y de provocar un genocidio con las personas de cultura rusa.

La reconciliación en ese estado tan artificial que fue Ucrania es imposible. Los rusos que allí vivían y viven, de Jarkov, Donbass, Jersón, hasta Odessa, deberán ser parte de su verdadero país, donde tienen su existencia garantizada, la Federación rusa. La desnacionalización en otras zonas no puede eludirse, porque ellos no pararán hasta destruir o ser destruidos. No hay alternativa. El que hayan criado una generación de jóvenes en la ignorancia y el odio hacia lo ruso, a los que consideran como subhumanos a los que hay que exterminar, no tiene otra solución. 



Como decía no hay otra alternativa. Cerrar en falso esta guerra conducirá a tragedias peores en el próximo futuro. Algunas se convertirán  en fatales y definitivas para todos. Por ese motivo no debe volver a ocurrir.

Lo dice muy acertadamente el que fuese diplomático israelí y que vive en la Federación rusa, Yakov Jedmi. Cómo vas a negociar con alguien que llegó al poder ilegalmente y mediante la violencia, para posteriormente perseguir, discriminar y asesinar a personas que son realmente tus hermanos, sino que además busca destruirte a ti mismo y a tu gente? Cómo vas a negociar con aquellos que han incumplido todos los anteriores acuerdos y han provocado todo esto? No se puede hablar de desnazificación sin acabar con los nazis, como no se puede hablar de paz dejando en la impunidad a los que la quebrantaron y quebrantarán.

Solo hay un camino y este es claro. Y no es para aquellos llenos de complejos y prejuicios, y que están abandonados de criterios claros y sensatos. Cuanto más tarde en imponerse la sensatez y el valor para establecerla, más peligro tendremos de que esto finalmente se convierta en un infierno  para todos.



PS (20.02.23).

La locura nazi en Ucrania es total. Cantando con los padres y sus niños que hay que acuchillar y colgar a los rusos.



César Vidal, y no o la "izquierda" occidental, denuncia la enorme corrupción de Zelensky y de los oligarcas a los que sirve en Ucrania. Han hecho de la guerra su gran negocio, a costa de la vida de miles de personas y la ruina de su país.


domingo, 5 de febrero de 2023

La guerra contra China ya ha comenzado. (PS. actualizado 05.03.23).

La prensa corporativa avivando los conflictos con su propaganda 

 Decía en el titular que la guerra contra la República Popular China ya ha empezado. En realidad lleva años desarrollándose. Lo han podido ver en los ataques diarios en los medios corporativos, en los "informes" propagandísticos de las organizaciones que utilizan inmoralmente los derechos humanos con fines políticos, cuando en realidad son ellas y sus padrinos los mayores vulneradores de tales derechos. Lo vimos en el caso de Hong Kong y lo veremos con Taiwán. Y lo vimos y vemos, el que quiso enterarse de cómo funciona el mundo, en la siempre guerra mixta: económica, militar, mediática y humanitaria de los Estados Unidos desarrollada contra la capacidad económica y política de China en su relación con Asia, África y el resto del mundo en el collar de perlas

Todo esto sucede porque los magnates de las finanzas, la industria u otro sector económico del mundo occidental no aceptan en realidad la competencia, la igualdad de condiciones. La globalización les ha venido grande y se les ha ido de las manos, porque otros, como China, tienen mayor capacidad para convencer, negociar y hacer llegar el progreso, no solo para ellos sino también para los países donde negocian. Algo esto último impensable para una mente tan colonial como las de nuestros dirigentes. 

El panafricanista Muamar Gadafi, como líder africano de ese llamado Tercer Mundo lo expresó claramente al general estadounidense William Ward sobre la diferente actitud de China. Así calificó:

...el acercamiento chino como suave, el estadounidense como duro. 1
y predijo que:
China prevalecería porque no interfiere en asuntos internos. 1
Además criticó:
...la tendencia de EE.UU. a colocar bases militares cerca de fuentes energéticas, señalando que si los EE.UU. hicieran esto en el Golfo de Guinea, dispararía el terrorismo. 1

 Por ese motivo, por la independencia económica y política que perseguía, fue asesinado. Entonces Estados Unidos pudo imponerse mediante la fuerza con su AFRICOM. Un África bajo el caos y la violencia es lo requerido para su explotación, fomentando mercenarios sin escrúpulos como  Boko Haram. Que tienen su función: atacar, destruyendo y asesinando, a los rivales de la oligarquía corporativa occidental. Los ejemplos desgraciadamente sobran.  Así, los medios ocultaron la realidad del atentado terrorista en Malí en el Radisson Blu Hotel que se cobró la vida de los más altos directivos de la China Railway Construction Corporation o de trabajadores de la compañía de aerolíneas  rusa Volga-Dnepr. 2  No fue la primera vez que sucedieron estos ataques y les anticipo que no será la última hasta que la propia Rusia y China desmantelen a estas organizaciones mercenarias y terroristas que actúan contra  ellos. Atentados terroristas contra empresas chinas se han sucedido también en Pakistán, 3 De ahí que la organización militar Wagner esté actuando en África, con bastante éxito y aprobación, como en Siria o Ucrania. Los ejemplos siguientes son de esta última en Soledar.




En occidente están muy temerosos del desarrollo de China y de su extensión por el mundo. Ya es la primera potencia económica mundial y esto quieren frenarlo. Como este desarrollo económico va a ir ligado también al militar, han puesto fecha para actuar, actuar por la fuerza, antes de que su competidor sea demasiado fuerte. Esta fecha establecida es el año 2025 y estamos a un paso de él. 4 Lo estamos viendo también. Ven, ya empiezan las noticias sensacionalistas y acusadoras. Hay que demonizar al enemigo para hacer creer a la población que es necesaria su destrucción al presentarlo irrealmente como un villano sin piedad y que no merece nuestra confianza. Ahora la campaña mediática que es necesaria para ir creando la histeria hacia la guerra, se basa incluso en cosas ridículas, aunque los propósitos e intenciones no sean nada ridículos ni en absoluto carentes de importancia. Así están una y otra vez repitiendo en todos los canales posibles que un globo espía chino sobrevolaba territorio americano yendo por sus bases militares. Que la gente crea algo tan absurdo demuestra el grado de inmadurez y de ignorancia de la población. Para espiar hay métodos serios, discretos y eficaces, como los satélites o personas que están introducidas con contactos en organizaciones e instituciones. De un globo errático por motivos climatológicos se construye una excusa para la incitación al enfrentamiento. Como el tiempo apremia verán una acción propagandista tras otra. Al final les harán odiar a China y la cultura china y sus gentes. Veremos discriminación y persecuciones de la población china en occidente, como en su día se hizo con los de origen asiático en Estados Unidos llevándolos a campos de concentración. Occidente no es ese lugar de tolerancia y de protección de los derechos humanos como finge ser, basta ver como en la misma Europa no solo se ha sido indiferente al drama ucraniano sino que lo ha provocado y agravado.

Ustedes, como yo, sufrirán los desvaríos de totalitarismo de nuestros dirigentes. Hasta qué punto nadie lo sabe. Por de pronto ya lo saben, porque lo han sufrido en sus carnes, se han disparado los precios porque se sanciona injustamente al gran proveedor de energía. Pero se dispararán aún  más cuando se haga con el mayor fabricante de productos, que además son más baratos. Y la culpa no la tendrán ni Putin ni el Partido Comunista chino, sino ustedes, cuando no digan la verdad y se unan a la histeria colectiva, y los que les mandan a ustedes.

Europa, los europeos de a pie, van a la ruina. 


Gonzalo Lira habla con claridad de esta situación y como la OTAN no ha podido derrotar a la Federación rusa y como tampoco van a poder con su principal rival, China. Esto hace que la situación sea tan tensa como peligrosa y de que tanto Moscú como Beijing midan cada paso a fin de no cometer errores que puedan ser fatales. Mientras tanto la población occidental vive absorta en sus mentiras y sus superficialidades.



PS:
No es casual que los países con cierta independencia de África prefieran a China respecto occidente. Estos últimos tratan con desprecio y violencia a los africanos, y como de costumbre les roban sus recursos. China les está llevando prosperidad y esperanza para acabar con la esclavitud a la que han estado sometidos por Europa y Estados Unidos. Lo explica estupendamente Rosa Moro.


El presidente de Namibia, Hage Geingob, pone en su lugar al embajador de Alemania. Por la falta de respeto e intromisión de este último, obsesionado en atacar a los chinos. África quiere a China y no a occidente. Los chinos no se entrometen en sus asuntos internos, les respetan y traen progreso y riqueza. África se está desarrollando gracias a esta colaboración, al contrario que cuando ha estado sometida a Europa o Norteamérica.


No todo el mundo traga las groseras mentiras gringas. La mofa está justificada.




Referencias-Notas:

1. Maximiliam Forte. Slouching towards Sirte. NATO´s war on Libya and Africa. Baraka books, 2012,

2. Eric Draister. Terror in Mali: An attack on China and Russia? New Eastern Outlook. 27.11.2015.

3. China workers killed in Pakistan. BBC, 15.2.2006.

4. War with China: Thinking through the Unthinkable. Rand Corporation. May 2016.