Nelson Mandela cumple 94 años, felizmente ha podido celebrarlos tras una larguísima y dolorosa lucha contra la brutalidad, la injusticia y el racismo de un régimen, el apartheid sudafricano, que fue apoyado de forma decidida y entusiasta por Estados Unidos, Gran Bretaña y también especialmente por Israel.
Cabe recordar que Estados Unidos consideró a Mandela hasta el mismo año 2008 como un terrorista, así como a su organización, el Congreso Nacional Africano. Sí el año 2008, no me he equivocado. Lo que habla del criterio y actitud de la Administración norteamericana, que es además precisamente quien más terrorismo causa en el mundo, luego pocas lecciones de moralidad puede dar.
Estados Unidos apoyó siempre el régimen del apartheid, pero no solo eso, también apoyó una intensa y violenta guerra contra sus vecinos africanos: Mozambique, Angola, Zimbawe, Zambia, Bostwana...
Cuando la Administración norteamericana tuvo problemas para apoyar económicamente y militarmente al apartheid, debido al embargo y oposición de Naciones Unidas, aquella recurrió a estados que hacían la función de mercenarios, haciendo este trabajo sucio, como es el caso de Israel:
Israel actuó durante años como el principal contacto con los militares de África del Sur especialmente tras el embargo [el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas impuso un embargo de armas obligatorio hacia Sudáfrica] Bien, esta es una alianza muy útil y es otra razón por la cual Israel recibe esas extraordinarias cantidades de ayuda de EE.UU.
(Del libro: Estados Unidos y el respeto a otras culturas y países)
Ronald Reagan, el presidente norteamericano, expresaba así la represión en lo guettos:
Se trata de negros luchando contra negros porque hay una problemática tribal pendiente en aquella comunidad.(Del libro: Estados Unidos y el respeto a otras culturas y países)
El padre Michael Lapsley, que perdió la visión de un ojo y sus manos, porque le enviaron una bomba sofisticada con una revista en 1990, solo tres meses después de la liberación de Mandela, explicaba la visión del poder estadounidense expresada a través de Reagan, donde este hablaba de la riqueza, los beneficios y la situación geográfica del país, pero no de los derechos humanos:
Yo creo que lo interesante de ese comentario es que se centra en el beneficio. No se centra en qué ocurre con la gente. Y, por supuesto, recordando que ese régimen que Reagan estaba apoyando era un régimen en el cual la mayoría de la gente no podía votar. La mayoría de la gente no tenía una forma legítima de quitar a un régimen ilegítimo.(Del libro: Estados Unidos y el respeto a otras culturas y países)
Mandela hoy sigue recibiendo honores, y los merece, tras su lucha y pasar 27 años encarcelado por ello. Aunque no debería de posar con quienes fueron los verdugos de su propia gente, como es el caso de Clinton o del propio Obama, que ha recuperado a antiguos colaboradores de la época de Bush que particparon en el apartheid, y que, además, realizan homenajes a genocidas como Reagan, como así hizo el propio Obama en febrero de 2011, o como hicieron al dedicarle el nombre de un aeropuerto en 1998, con Bill Clinton en la presidencia.
Está claro que Estados Unidos todavía no ha pedido perdón al mundo, y que sigue, como ahora en Siria, instigando la violencia y la intolerancia, y no el entendimiento, el respeto, la democracia y la paz.
Siempre me ha gustado la figura de Nelson Mandela... y recuerdo muy bien que estaba en la cárcel cuando fue lo de Steve Biko, a quien Peter Gabriel dedicó uno de sus grandes temas en 1982, época también en que Richard Attenborough filmaba Gandhi con un joven Ben Kinsgley.
ResponderEliminarQuizá el retrato que hace Clint Eastwood resulte muy simplista, pero lo considero un testimonio valioso.
Felicitaciones por el blog. Seré un lector habitual.
Hola Marco Antonio, la obra y el film sobre Steve Biko, Grita Libertad, refleja esa lucha contra quienes oprimían, y también contra la misma gente de color que se menospreciaba o traicionaba a sus compañeros.
ResponderEliminarEl retrato de Clint Eastwood es tal vez como comentas demasiado simplista. Mandela pasó casi 30 años en la cárcel y como digo fue considerado un terrorista prácticamente toda su vida, a diferencia de Lincoln no buscó el poder y a diferencia de él combatió el racismo y la injusticia social. Lincoln no defendía realmente la igualdad racial, esto lo he reflejado en mi obra sobre Estados Unidos:
"Diré, pues, que no estoy, ni nunca he estado, a favor de equiparar social y políticamente a las razas blanca y negra; que no estoy, ni nunca he estado, a favor de dejar votar ni formar parte de los jurados a los negros, ni de permitirles ocupar puestos en la administración, ni de casarse con blancos …"
Es Lincoln en la campaña electoral de 1858.
Un cordial saludo.