jueves, 10 de mayo de 2012

No hay motivos humanitarios en una guerra



A diferencia de la izquierda latinoamericana, la patética versión europea [de la izquierda] ha perdido todo sentido de que significa hacer política. No intenta proponer soluciones concretas a los problemas, y solo es capaz de tomar posiciones morales, en particular denunciando a dictadores y violaciones de derechos humanos en tonos grandilocuentes. La izquierda social-democrática sigue en el mejor de los casos a la derecha con unos años de retraso y no tiene ideas propias. La izquierda "radical" a menudo lleva a cabo tanto una denuncia de los gobiernos occidentales en cualquier forma como la demanda de que esos mismos gobiernos intervengan militarmente en todo el planeta para defender la democracia. Su falta de reflexión política los hace ser muy vulnerables a las campañas de desinformación y los convierte en pasivos animadores de las guerras de EE.UU y la OTAN. Esta izquierda no tiene un programa coherente y no sabría que hacer incluso si un Dios los pusiese en el poder.
Jean Bricmont.

Estas palabras de Jean Bricmont reflejan bastante bien la situación de desorientación moral y política de la llamada "izquierda" europea. Han justificado guerras, en Yugoslavia, Libia, o incluso ahora en Siria, amparándose supuestamente en los derechos humanos.
Las guerras no se hacen por "motivos humanitarios", aunque estos aparezcan siempre para justificarlas. Se ha hecho esto desde la antigüedad: Egipto, Grecia, Roma, el Imperio español, el Otomano, la Primera Guerra Mundial, la Segunda, las invasiones del Imperio estadounidense, etc.
Podemos recordar aquí algo que  acertadamente  apuntó Arthur Ponsonby, y que no se ha dejado de cumplir y repetir una y otra vez:

La falsedad es una reconocida y extremadamente útil arma en tiempos de guerra, y cada país la usa deliberadamente para engañar a su gente, para atraer a los neutrales, y para engañar al enemigo. La gente ignorante e inocente de cada país no es consciente en el momento de que están siendo engañados, y cuando todo ya ha pasado solo aquí o allí se descubren las falsedades y son mostradas. Como todo es ya historia pasada y los efectos deseados ya se han producido, nadie se preocupa por investigar los hechos y mostrar la verdad

Un ejemplo de falsedad reciente fue la emitida en los grandes medios de comunicación sobre los supuestos ataques de Gadafi a su población. Estos ataques no sucedieron, no tuvieron lugar, como documentaron los testigos presentes y las observaciones por satélite.



El resultado hoy una Libia  arruinada y en manos del extremismo islámico y las grandes compañías occidentales, que se han hecho con sus recursos naturales y con el Banco de Libia.Ya no sale esto en la televisión.

Las guerras se hacen por motivos de poder, por someter a los rivales y obtener grandes beneficios económicos con ello.

6 comentarios:

  1. Tu post me ha hecho recordar esa joyita del freecinema inglés que es La última Carga. Una versión de la carga brigada ligera que incide en la manipulación y en el descaro imperialista, que no ve otra cosa que dinero y poder. Tan sencillo, repetido como verdadero. La recomiendo encarecidamente.
    ¿Por cierto cuantas mezquitas nuevas se habrán construido desde que USA ocupa Irak?
    Con toda seguridad cuadriplicaran el número de escuelas y hospitales. Pq las destruidas....

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  2. Es vergonzoso cómo la izquierda de este país despotrica contra el imperialismo yanki y luego son los primeros en difundir sus mentiras. El grupo Mediapro (la supuesta "izquierda" mediática) es un buen ejemplo. Eso no quita para que en Público haya (ahora ya sólo en su edición digital) periodistas/escritores bastante potables, como Isaac Rosa, que escribió el excelente libro Kosovo, la coartada humantaria junto con Aleksandar Vuksanovic y Pedro López Arriba.
    Un saludo y a seguir con tu valiente denuncia de la guerra.

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  3. Es cierto que dentro de los medios de comunicación hay también periodistas honestos.
    No he leído ese libro de Isaac Rosa sobre Kosovo, voy a ver como está. Recomiendo sobre este tema dos importantes obras que reflejan muy bien el comportamiento de los medios de comunicación con su falsificación de los hechos con el objeto de posibilitar una guerra brutal (como todas) contra Serbia: Killing a nation de Michael Parenti y Los Guardianes del poder de David Edwards y David Cromwell.
    Saludos.

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  4. Pero, es que el que un partido diga en sus siglas que es de izquierdas, no quiere decir que lo sea. De izquierdas son los que hacen políticas de izquierdas y hay que tener claro que es y que no es esto.
    Sobre las guerras y sus porqués, creo que es algo evidente pero que a pesar de todo, nos seguimos dejando engañar... y matar, porque los que mueren no son ellos, somos nosotros, siempre nosotros.

    Saludos.

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  5. Así es, y me es grato encontrar blogs con énfasis en la paz, como este. Frente a los cantos de sirena de los santiagoalbaricos que, por defender una imaginaria “revolución”, son capaces de convertirse en compañeros de viaje (involuntarios, supongo) de la coalición OTAN-Al Qaeda.

    Un saludo y mucho ánimo.
    Cordura

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  6. No se puede estar a favor de la paz y a la vez defender una guerra "humanitaria". No hay guerras "humanitarias", hay guerras que utilizan la excusa humanitaria para conseguir otros fines.

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